
«La delicada situación en materia de civismo por la que pasa la ciudad aconseja un pacto que se traduciría en una Ordenanza Municipal que termine con el inasumible quietismo político actual«.
3R pide al equipo de gobierno, “desnortado políticamente” y “envuelto en un inasumible quietismo político”, un acuerdo político «por la Convivencia Ciudadana, el Civismo y la Urbanidad» con la sociedad civil que se traduzca en la aprobación de una «Ordenanza Municipal de convivencia ciudadana y civismo» con dotación económica para sus medidas, «a nivel preventivo, de concienciación, e inclusive coercitivas«.
Para la Plataforma 3R «esta ciudad se encuentra en una situación delicada en materia de civismo y de convivencia ciudadana, dado el latente estado de incidentes en esta materia: daños al mobiliario urbano, botellones y sus efectos, parques infantiles sucios, ruidos a altas horas de la noches, grafitis por doquier, daños en parques públicos, residuos sólidos y su introducción en los contenedores…«.
Para empezar, 3R propone «la convocatoria urgente de una mesa de trabajo con un documento transversal de base, como son las propuestas de la FEMP en este campo. Entendemos esta urgencia y pensamos que después de 40 años de democracia, es injustificable que aún no dispongamos de un instrumento de esta naturaleza que defina derechos y obligaciones en el marco de la cultura democrática que todos deseamos«.